26 julio 2009

Análisis - Hungaroring 2009

En Hungaroring la temperatura era superior a la de la clasificación, pero la ratonera tiene costumbre de mantener en sus plazas a los pilotos. La diferencia de pesos entre Hamilton y Button revelaba la importancia del juego estratégico, y la aportación definitiva de la primera llegada a curva sobre el resultado final - la única oportunidad para resolver en pista.
Definitivamente Massa quedó descartado por la gravedad de sus lesiones, que parecían crecer en magnitud en proporción a los detalles al descubierto de su accidente.

La salida de los Red Bull ha sido lamentable, y Vettel la ha pagado realmente cara. Räikkönen y Hamilton han exprimido a fondo el KERS - aunque aún así Alonso ha conseguido escapar de ellos - y entre ambos han golpeado a Sebastian, atrapado en la caravana, dañando irremediablemente su coche, aunque no estallarían los problemas hasta el segundo stint. En el duelo particular Iceman ha estado francamente espectacular, y su agresividad ha propiciado una salida de pista de Lewis sin la que, quizá, hubiera pasado por meta delante de Webber.
Sebastian no ha sido el único que ha padecido la arrancada de McLaren y Ferrari: Button cayó a la novena posición y Barrichello, con problemas, a la decimosexta.

Los monoplazas se han reordenado con dos eventos inesperados en Hungaroring: Button ha adelantado a Nakajima y Hamilton a Webber, forzando con un hábil engaño al lentísimo Red Bull que, inmediatamente después, ha formado un trenecito con Räikkönen y Rosberg. La ligera Flecha de Plata, después de la inteligente proeza, se ha lanzado con vuelta rápida a recortar la diferencia de 2,5 segundos con Alonso.
Al final del stint, Kovalainen seguía sexto, reventando la carrera de Vettel, y Mark despertaba para ganar algo de aire a Iceman. La presión se derivaba a Vettel, frenando a la desesperada por el acoso de Nakajima.

La pronta parada de El Nano ha sido un desastre que ha allanado el camino de McLaren: en la vuelta
12 una tuerca mal apretada ha costado sucesivamente tapacubos, neumático, llanta y abandono.
El pit stop simultáneo de Webber y Räikkönen se ha saldado con un cambio de posiciones, que por precipitación de los mecánicos le ha podido costar la carrera a El Almirante o por contacto a ambos - de hecho el extraño comportamiento del Red Bull le ha hecho perder temporalmente su puesto con Glock.
Sin embargo las desgracias no se han quedado ahí y la accidentada salida por fin le ha pasado la factura a Vettel, que avisaba sobre la poca maniobrabilidad del coche después de su repostaje antes de regresar al box y abandonar - Trulli se colocaba delante de Button, pero la suerte parecía estar de parte de Jenson, por lo menos lo suficiente.

Las distancias entre Hamilton, Räikkönen y Webber eran lo suficientemente grandes, 7 y 13 segundos, aunque de nuevo el Red Bull volvía a acumular tráfico tras de sí - Kovalainen y Rosberg - mientras los Toyota retenían a su principal rival pasada la parada a media carrera de Barrichello.
Iceman, al límite de forma bastante expresiva, se cruzaba saliendo de las curvas pero era incapaz de acercarse a
Lewis; por su parte, Mark parecía tener algo guardado para abrir hueco al final del stint cuando el pitwall le ha pedido un poco más.

La última parte ha sido tediosa, por mucho que Ferrari haya intentado animarla con uno de sus incomprensibles problemas que casi obliga a Kimi a regalar la segunda plaza (un reset durante el repostaje). Nico se mantenía firmemente pegado a El Almirante, logrando adelantar a Kovalainen en el pit stop,y el novato, en este clima poco habitual en estas latitudes, se ha visto fuerte antes de repostar y ha buscado a Piquet, la sombra de Heidfeld. Aprovechando esta distracción Nelsinho se ha hecho con el BMW.
Aunque Trulli ha ido casi tan largo como Glock, que ha hecho su segunda parada en la vuelta 60, se ha visto incapaz de abrir el suficiente hueco con Button, lo que ha vendido bastante barata a Brawn la séptima posición por su falta de ritmo. Quedaba un trompo de Buemi que ha evitado que Alguersuari terminara último y una inexplicable vuelta rápida del ubicuo Webber, una de esas acciones arriesgadas sin premio difíciles de entender.

La bandera damero ha saludado, por primera vez esta temporada, al McLaren de Hamilton, seguido contra pronóstico por Räikkönen, y de forma bastante más acostumbrada a Rosberg en cuarta posición. Button ha conseguido dos puntos que pueden ser vitales.

La conclusión del Gran Premio de Hungría es que se sigue disputando en el pit lane. Ni siquiera la lucha de tiempos ha sido capaz de divertir en una carrera de la que hay que descontar dos adelantamientos curiosos más que nada por sus protagonistas: el venido a menos Button y Hamilton sobre el teóricamente superior Red Bull de Webber.

En lo competitivo, parece que McLaren y Ferrari han encontrado el camino con sus segundas
especificaciones, aunque con una brecha entre ambos: Räikkönen parece haber sacado partido del bajo rendimiento de los Red Bull, aprovechando el bache, mientras que la superioridad de las Flechas de Plata parece genuina, o al menos así lo indican los trece segundos insalvables de liderato de Hamilton.
La imagen de ambos equipos ha sido esa, y no apunta a uno de esos toques de genio que de vez en cuando saca Lewis, porque Kovalainen, en quinta posición, ha marcado un ritmo alto y regular.

El esperado resurgir de los dinosaurios del Gran Circo es una mala noticia para Chris Horner, que verá mermadas las posibilidades de recortar puntos debido a sus nuevos rivales; pero lo que más debería preocuparle, en principio, es que en realidad la impresión es que Ferrari y McLaren aún no están a la altura de Red Bull - el lamentable arranque de Mark y Sebastian los ha hundido, y es una situación que con el KERS de por medio puede repetirse más a menudo.
Cuando se le ha exigido Webber ha sido capaz de apretar y mejorar su ritmo; sólo las bajas revoluciones de la pista aparecen como explicación.

Quién se ha quedado sin justificaciones es Ross Brawn, y la razón se la ha quitado la alta temperatura del
asfalto. Todo apunta a que sencillamente el desarrollo tecnológico se ha parado por el mismo motivo que ha explotado con gran éxito en McLaren y Ferrari: presupuesto.
En ese punto es en el que la irrupción de los grandes se vuelve una noticia aún peor para Button, dado que de recuperar el ritmo, Webber y Vettel pueden dedicarse a dejar cuatro coches - si no más - de por medio, comiéndose a Jenson a mayor velocidad, porque Barrichello puede haberse esfumado en la nube de sus quejas contra el equipo.
Si la explicación es que la ratonera tiene pocas curvas rápidas y no es un trazado muy propicio, entonces Button puede mirar el calendario e ir pensando en la fotografía que dejará para la historia como el Campeón del Mundo que nunca fue: dos soporíferos paseos por la ciudad y dos toboganes parecen pensados como el peor fin de fiesta de la historia para Brawn.

Alguersuari acabó la carrera, fue regular en un tiempo bastante malo y gracias a un trompo de su compañero terminó penúltimo; arrastrarse por los circuitos, en lugar de ganar en categorías inferiores mientras se dan vueltas y vueltas haciendo las pruebas al monoplaza, es la mejor manera de estropear su futuro.
De momento no es Lewis Hamilton, sino El Trueno Azul Gastón Mazzacane.

Una nota especial merecen los reyes de la regularidad, Williams y Rosberg, otra vez casi pisando el podio, haciendo su carrera y puntuando. Se consolidan detrás de Brawn y Red Bull y nadie, al parecer, sabe de dónde sale Nico en el tercer stint y cómo,
sin hacer ruido, acaba delante de los demás.

La carpa del Gran Circo presenta un aspecto completamente renovado.
Button mira los Grandes Premios como una angustiosa cuenta atrás en la que su insultantemente poderoso monoplaza antaño intenta arañar algún punto, Webber avanza con paso firme, a pesar de alguna pisada temblorosa y Vettel con su incidente, del que no ha sido culpable más que de quedarse atrás, ha vendido en principio sus opciones -más a su compañero que a Brawn - aunque están llamados a triunfar como equipo tras la misteriosa desaparición de Barrichello.
En las últimas tres carreras la puntuación aplasta con la contundencia que sólo tienen las Matemáticas: 9 puntos para Button y Barichello; Vettel 18 y Webber 24 para dejar la distancia en 23 y 18,5 puntos respectivamente.
Hamilton y Räikkönen aparecen dispuestos a desbaratar la situación intentando simplemente apuntar todas las victorias posibles en una temporada perdida, aunque faltando por ver a quién va a perjudicar más su explosión.
Y como una sombra Rosberg, progresando con Williams en la terna de Grandes Premios que han dado la vuelta al Campeonato del Mundo con el tercer mejor registro, 14 puntos.

En el capítulo de sanciones creativas y legislación humorística, el fallo de Renault poniendo la rueda a Alonso, que podría haber estado incordiando a los de arriba hasta que la bomba de gasolina dijera basta, ha sido castigado con un Gran Premio de suspensión.
Brawn con una pieza desprendida que le ha podido costar la vida a Felipe Massa - de momento parece imposible que vuelva a correr esta temporada - competirá en Valencia.


Enhorabuena a Lewis Hamilton, extendida a McLaren y Ferrari por su vuelta a lo más alto.

Felicidades a Webber, que con una estrategia injusta pero competitiva debería quedar como primer piloto con el sacrificio de su compañero.

Ánimo a Felipe Massa, en recuperación de un gravísimo accidente imposible; por suerte los pilotos de F1 están hechos de otra materia.


Rumbo a Valencia.

6 comentarios:

J. ARCE dijo...

Williams siempre amaga pero nunca pega. Es una pena. Lo de McLaren podría ser debido a las características ratoneras del circuito; en circuitos de alta velocidad no vs tan bien. Y Brawn ya no puede excusarse sólo en las bajas temperaturas, su situación es preocupante y más les vale espabilar. Qué razón tenía Ross Brawn cuando apostó todo por Button. Lo de que Webber es el líder de Red Bull aún está por ver pero su regularidad le puede dar el título.

David dijo...

La impresión con Williams es que Rosberg hace lo que puede; lo de la pegada está en los límites naturales de evolución del coche.

La clave del éxito de los dos equipos privados en cabeza es una inteligente interpretación del reglamento y un ingeniero genial, respectivamente.

Nunca pensé que escribiría sobre Mazzacane, y menos en Hungaroring.

Leonov dijo...

Hola a todos.

La carrera hubiera sido aburrida para mí de no haberla visto con un ojo en la televisión y otro en el monitor de tiempos. Me puse el portátil la lado de la tele y hay que ver qué importante es.

La parte más interesante, además de la espectacular salida de Kimi, ha sido la intermedia, entre ambas paradas. Ha sido una especie de guerra psicológica entre Ferrari y Mclaren. Cuando Kimi hacía un 29,7 y un 30,0 en el primer y segundo parcial, Lewis contestaba bajando ambos parciales en la siguiente vuelta. Ambos volvían a clavar tiempos, rondando las mismas marcas en todo momento. Y así hasta el segundo repostaje.

Obviamente, si uno es Domenicalli, con un piloto en el hospital, un solo coche en pista, una temporada atípica, un reto en el campeonato de constructores de por medio, etc; lo más inteligente es recoger el segundo puesto, con 8 puntos para constructores, 8 para Kimi, rueda de prensa, cumplir con patrocinadores y a casa con un buen resultado. Esa es, a mi modo de ver, la clave de por qué la diferencia creció en 7 segundos en la tercera parte de la carrera. Por cierto, que lo del error fue, en realidad (según declaraciones de Dyer, creo recordar), una precaución por anomalías en las lecturas de la temperatura de un escape, o algo así, no por un error del piloto. Cambiaron el procedimiento de salida para evitar un contratiempo mecánico.

Respecto a Alguersuari, creo que no es interesante lo de venirse a casa con un abandono en la primera participación. Eso es como si a Kimi le da por intentar seguir el ritmo de Jari-Matti o de Hirvonen en Finlandia este fin de semana. Estoy seguro de que, desde el equipo, el encomiaron el terminar el Gran Premio y ya veremos.

Respecto de Brown, estoy conforme con hablar del final de la escudería. No hay dinero, por tanto, no hay desarrollo y sus días están contados. No creo que gane el título. No pueden ponerse a trabajar ahora sobre la base de un coche que lleva casi un año sin ser desarrollado en líneas generales. Pero bueno, en cualquier caso, hay que reconocer que Brawn es un pedazo de profesional de los pies a la cabeza y ahí están los resultados.

Al que veo algo desatado es a Webber. Desatado de boca, más que nada. Se conoce que ha ido a la misma academia que Alonsito bocas. Lo digo porque no para de mencionar a los demás a cuenta de no se qué intenciones. Hace pocos días acusaba a Kimi medio de beber vodka en mitad de la pista y el jueves pasado hablaba de quitarse el sombrero ante él por correr el Rally Mil Lagos. Hay que ver. Esos movimientos de personalidad y parecer tan pendulares..., dicen poco a favor del sujeto que los procura.

Quedan muchas incógnitas que resolver de aquí a final de temporada. La más importante, creo yo, es el tema del KERS. Si este dispositivo ha provocado tal cataclismo este año entre escuderías con y sin él, ya se deberían de haber decantado para su uso, o no, el año que viene. Sinceramente, a día de noy no tengo opinión sobre si es mejor introducirlo definitivamente en competición o no. No tengo previsión alguna del impacto que producirá en este y en cualquier otro deporte de motor.

Finalmente, suscribir tus apreciaciones sobre Williams. Una lástima que el japonés no esté a la altura de su compañero en tanto que Frank siempre ha apostado por tener un equipo equilibrado más que por el mejor piloto de la parrilla. Sería interesante ver a Williams en las zonas punteras de la tabla de constructores.

Gracias, David.

Hiarbas dijo...

La locaza ha conseguido que vea la tv practicamene en mute y con el portatil y el live timing corriendo...Me pierdo el natural sound de los F1 pero que se le va hacer...En carreras como Hungria y Valencia no puedes hacer otra cosa.

Excelente trabajo, como siempre.

Solo un matiz. Te has mojado al criticar el debut de Alguersuari. Yo dudo en si es bueno o no, y hace poco creia que seria malo para su futuro. Pero mira, quien no arriesga no gana. De momento la unica meta que le han puesto es sumar kilometros, y eso es lo que ha hecho. Nada que objetar, no siempre se puede debutar con un Mclaren ganador.

Saludos.

J. ARCE dijo...

A Alguersuari habrá que juzgarlo en dos otre carreras. Do momento ni para un lado ni para otro. Respecto a lo que dice leonov de kimi supongo que es una cuestión de coherencia. Si alguien hace algo que te parece mal lo critucas y si la misma persona hace algo que te parece bien lo ensalzas.

Nacho Rivero dijo...

Alguersuari tiene que aprovechar las oportunidades que le den.
Ahora mismo es piloto oficial de F1, si dejase pasar este tren, intentando ganar las word series (ayer ganó una carrera, por cierto, y quedó tercero en la otra...) quizá no consiguiese jamás un F1.

Decías por ahí: "Parece poco probable que Jaime pueda acabar esta carrera tan simple."

Poco menos que una chicane móvil... pues ya ves, en F1, como siempre, un 90 % lo pone la máquina y el Toro Rosso no está para ser doblado ya por ninguna otra escudería.

Bien por Jaime, que no necesitó tests especiales para subir al F1... cosa que la Fota le va a permitir ahora a Schumacher. ¡cómo es este circo!