La última carrera de la temporada, el Grande Prêmio do Brasil, se disputará sin que el piloto y la escudería vencedores estén decididos.
El Autódromo José Carlos Pace será el último circuito dónde compita Michael Schumacher, un acontecimiento al nivel de la proclamación de los campeones del mundo. El fin de semana en Interlagos será lo suficientemente intenso para ayudar a sobrellevar la ausencia de Fórmula 1 hasta la próxima temporada.
La perspectiva respecto a la situación es casi el resumen de la temporada: la superioridad de Fernando Alonso, las esperanzas de Michael Schumacher, el auge de BMW o el fracaso de Williams son hechos a ratificar por última vez.
Sin duda, por muchas vueltas que se le quiera dar a los puntos de interés, la atención se centra sobre el Campeonato de Constructores, con el título de Fernando Alonso dado por seguro; Ferrari y Renault van a ser seguidos con atención puesto que de sus resultados dependerá la clasificación final.
El resto de pilotos y escuderías tienen sus propias batallas, pero en esta ocasión quedan en segundo plano.
El circuito de Interlagos, en São Paulo, destaca por su sentido de circulación, antihorario; lo inhabitual de este hecho agrava el efecto de las curvas rápidas del trazado.
La pista es vieja, demasiado bacheada, y en conjunto, a pesar de que nunca ha habido un accidente mortal, está considerada como muy peligrosa ... el perro paseándose durante la clasificación de 2004 contribuye a su mala fama. Sin embargo, a diferencia de los circuitos actuales, Interlagos tiene una gran cualidad debido a su antigüedad: fue construido y remodelado adaptándose a los desniveles del terreno, y eso ha dado tramos memorables, como la S de Senna.
El trazado se puede resumir en sus puntos más importantes. De la recta de tribuna se desciende por la Decida do Sol a la complicadísima S hacia la Recta Oposta; de esta zona rápida se pasa a tres curvas muy agudas acompañadas de tramos cortos de aceleración, Laranja, Pinheiro y, especialmente, Cotovelho. A partir de ahí, pura potencia en la curva peraltada en subida que forma parte de la recta de meta: un tramo larguísimo recorrido a fondo; el hecho de que la entrada al pit lane esté en el interior de la curva hace muy complicado el acceso, puesto que la velocidad lanza los monoplazas hacia afuera. Desde el inicio de esta curva hasta la salida de la S de Senna, sin escapatorias en todo el tramo, rozando el muro, está concentrado todo el riesgo de este circuito, que no es poco.
El set up del coche se establece en base a la principal característica de Interlagos: los inevitables baches, que nunca se han conseguido eliminar debido al terreno lacustre.
A pesar de lo que pueda parecer la potencia del motor no es determinante en los tiempos, aunque la subida en sexta es especialmente exigente. Los frenos, los neumáticos no son factores críticos, aunque el grip suaviza el efecto de la pista irregular.
El trabajo de los ingenieros se centra en la posibilidad de lluvia, dada la inestabilidad del clima, debido a una curiosa cualidad de la pista: la temperatura del asfalto se mantiene a pesar del agua. Este hecho plantea el dilema de configurar el set up para seco o mojado; si hay lluvia, pero no la suficiente, los coches preparados para agua solo pueden esperar un mal resultado, y en el caso contrario los que arriesguen se pueden encontrar en la situación de 2003, cuando el desguace de São Paulo se llenó de monoplazas que esperaban menos lluvia.
La posibilidad de lluvia para el fin de semana mantendrá a los equipos con la vista en el cielo y los termómetros en el asfalto.
La clasificación de Brasil hubiera sido de las más tranquilas de la temporada si no hubiera sido por el protagonista del Gran Premio, Zapatero.
En la primera ronda se ha visto el único accidente, el trompo de Tiago Monteiro en el sector más lento, y ha supuesto la eliminación de David Coulthard, muy irregular en el final de temporada, que ha permitido el paso del Toro Rosso de Vitantonio Liuzzi.
La segunda sesión ha estado marcada por el registro impresionante de Michael Schumacher, que ha mantenido hasta el final, y ha mostrado el rendimiento de los Toyota, muy fuertes. En el último minuto Botón, Físico y El Bueno estaban fuera; después del esfuerzo final sólo ha quedado eliminado Jenson Button, junto a Pedro Martínez de la Rosa, desplazado por el Renault y el BMW.
La ronda definitiva ha dado la noticia en la primera vuelta. Nada más iniciarse Michael Schumacher, que se había colocado en primera posición a la salida del pit lane, parecía dejar pasar al resto de los coches, reduciendo su velocidad de forma ostensible; parecía una estrategia de El Mago del Suspense, pero cuando Zapatero se dirigió directamente, sin completar la vuelta, a su box y Ross Brawn saltaba de su asiento en el muro quedó claro que algo grave e imprevisto había pasado.
Michael Schumacher saldrá décimo en principio si no se ve obligado a cambiar el motor.
En cuanto a la pole se ha mantenido en manos de Felipe Massa, aunque tras el primer cambio de neumáticos ha pasado por manos de Físico, El Nano e Iceman antes de que el Ferrari la recuperara. El cuarto puesto de Fernando Alonso parece una ventaja insalvable que nadie esperaba antes de iniciarse la tercera ronda.
El dato más negativo lo han dado los BMW, por detrás de las primeras escuderías, a pesar de la progresión de Robert Kubica al principio; por otro lado los Toyota han brillado en la clasificación. El tercer puesto de Jarno Trulli es prometedor.
La carrera se presenta con Michael Schumacher sin nada que perder, y ha de arriesgar al máximo tras su mal resultado si quiere retirarse si no con un Campeonato del Mundo más, al menos con una última victoria. Por su parte Fernando Alonso seguramente salga a la pista con la calculadora en la mano y se dedique a rodar como un taxi con la vista puesta en Zapatero y la zona de puntos.
El otro punto de atención está en cabeza, en la lucha particular por la victoria que se dará entre Felipe Massa y Kimi Räikkönen; y la batalla de Jarno Trulli por mantenerse en el podio.
La previsión es una victoria para Felipe Massa muy disputada, una remontada fuerte de los BMW (las estrategias sobre repostajes pueden pesar mucho) y, probablemente, de Rubens Barrichello y un puesto discreto, conseguido de forma conservadora, de Fernando Alonso, que le dará su segundo Campeonato del Mundo y seguramente el Mundial de Constructores a Renault, a la vista de la debacle tecnológica de Michael Schumacher.
No pierdas de vista la S de Senna, a Iceman, la recta de meta y a los Toyota.
De un par de ideas para ganar en los Goya del 2018
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Mi querido amigo Luis Ramón sugiere, *for free*, unas cuantas ideas de
tramas para obras cinematográficas que, a buen seguro, coparán los primeros
puesto...
2 comentarios:
Hola, hoy he seguido la carrera por la cosa de la despedida de Schumacher, no sé qué van a hacer en este país sin él... de momento la RTL sigue entrevistando a Schumacher padre, y por cierto, hablando de la familia, ¿te dicen algo los nombres "Pornoralle" y "HardCora"? Es una historia graciosa. Otro día te la cuento.
Saludos,
C.
Danke Christine.
En esto de la F1 también tengo mi faceta de sacar la aguja de punto y darle a la muy; al fin y al cabo esto es un Gran Circo.
Me imagino que Hardcora tiene algo que ver con la señora (a lo mejor es mucho decir) Cora Schumacher; más cvoncretamente con su vida cuando era señorita (eso si que es decir demasiado).
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