20 julio 2007

Briefing - Nürburgring 2007


En la dinámica de la presente temporada el menos favorecido por el Gran Premio de Alemania, el que más tiene que perder, es Lewis Hamilton, paradójicamente debido a sus buenos resultados. En estos momentos, en los que el novato debería preocuparse por sumar puntos y conseguir algún podio, se encuentra líder del Campeonato del Mundo con la mitad de carreras completadas, sometido al acoso de los mejores pilotos.
Y es en este momento cuando su compañero, Fernando Alonso, ha decidido despertar e impartir unas cuantas lecciones, sin olvidar, por
supuesto, a Ferrari, que en esta temporada tan igualada han vuelto ha ajustar el mejor monoplaza.
El objetivo del líder es conservar su ventaja mientras que su equipo tiene que asumir riesgos para alcanzar la última evolución de los Rayos Rojos; la mejor opción para McLaren es enfrentar a El Nano contra su enemigo natural, Iceman, aunque en este momento, cuando la fatiga de la competición empieza a señalar a los fuertes, los veteranos Alonso y Räikkönen parecen haberse aliado para recordar a las escuderías quién manda.

Aunque la presión, aparte de encontrarse en el catastrófico equipo Toyota y en menor medida en Williams, está dentro de BMW.
Robert Kubica, renacido más fuerte, como un Supersaiyan, ha demostrado el gran rendimiento del coche y del equipo con su solvencia en los últimos Grandes Premios, lo que eleva la atención sobre Nick Heidfeld. En carrera El Bueno ha mostrado un gran ritmo, compitiendo con una agresividad y habilidad aparentemente superior a la de su compañero, pero lastrado en sus resultados finales por malas clasificaciones, totalmente incomprensibles e injustificables por sus problemas físicos, que en todo cas
o deberían perjudicarle durante todo el Gran Premio.
El gran reto en Nürburgring es de Heidfeld, obligado por las circunstancias y su propio talento a volver a pelear junto a Ferrari y McLaren.

La clasificación ha estado marcada por un accidente que ha podido tener graves consecuencias, más allá del evidente impacto sobre el Campeonato del Mundo, además de la nueva incorporación de Spyker: Markus Winkelhock.
La primera ronda ha dado la primera medida de las diferencias en BMW, con la pequeña distancia entre Heidfeld y Kubica, muy igualados aunque con ventaja para El Bueno. Sin embargo en tres escuderías quedaban patentes los rendimientos dispares entre pilotos con el mismo coche: Button, Rosberg y Coulthard se encontraban con el tiempo cumplido entre los eliminados mientras que sus compañeros estaban salvados con holgura; sólo el Williams ha conseguido hacer una marca suficiente para pasar. Al límite los Super Agui también han superado el corte.
En cuanto al estreno de Winkelhock, ha hecho exactamente lo que se esperaba de él, porque ha quedado último, peleando por mantenerse en el asfalto y estorbando a los demás coches; especialmente perjudicando a Heikki Kovalainen, que hasta el final no ha tenido la seguridad de un buen tiempo por culpa del tráfico.

La segunda sesión se ha iniciado con los Toyota saliendo a por todas, colocándose entre los diez primeros, lo que inesperadamente ponía toda la presión sobre Fisichella, por debajo del corte mientras Kovalainen se colocaba justo detrás de los BMW; algo parecido a lo que le sucedía, en menor medida a Wurz, aunque al final
Rosberg ha sido eliminado junto a él .
El atasco de Físico en Q2 se confirmaba simultáneamente al paso de Webber entre los diez mejores, un resultado que da que pensar en Renault y, sobre todo, en Red Bull. En ese instante, en otro sector del circuito, la NGK Schikane, Jarno Trulli desperdiciaba su mejor vuelta debido al sobreviraje del Toyota, lo que únicamente le ha sacado de la pista sin afectar más al coche.
La ronda definitiva se ha iniciado con una absurda lucha entre Massa y Hamilton, que se ha prolongado más allá de lo debido, con el comportamiento injustificablemente arriesgado del McLaren, excesivamente pegado al Ferrari. En las primeras vueltas Alonso, Räikkönen y Heidfeld han ocupado las primeras posiciones, continuando la rebelión de los expertos, y las han mantenido debido a las circunstancias de carrera hasta la última vuelta.
Inmediatamente después del primer cambio Lewis Hamilton ha sufrido un reventón en la S de
Schumacher, rapidísma variante, debido a un problema con la tuerca, perdiendo el control a más de 250 km/h; el resultado ha sido un choque semifrontal contra las protecciones, lo que ha destrozado completamente el tren delantero y ha mandado al piloto al hospital. La sesión ha sido neutralizada con la bandera roja a falta de cinco minutos, lo que dejaba para la reanudación una sola vuelta óptima.
Al reiniciarse Massa se ha colocado, en principio, primero, aunque rápidamente Iceman se ha hecho con la pole; Alonso ha llegado a la segunda posición a pesar de un patinazo en el segundo sector, un resultado asombroso que provoca algunas dudas sobre la estrategia de McLaren. El más destacado ha sido Mark Webber, que ha colocado en sexta posición su Red Bull, líder del grupo intermedio.

La previsión es una victoria disputada entre Räikkönen y Alonso, aunque el resultado más probable sea el
podio de Massa, que puede verse muy beneficiado por alguna jugada de El Mago del Suspense, incluso para ganar la carrera. Detrás, a la expectativa, y brindando un buen duelo entre ellos, BMW.
Es probable que la ventaja de carga beneficie a Fisichella y Rosberg frente a los iregulares Toyota, que pueden pagar con una gran decepción su búsqueda de un resultado llamativo. Sin embargo el espectáculo lo darán con total seguridad Mark Webber, un habilidoso conductor con un coche modesto, y el acoso de Kovalainen, con ventaja teórica sobre el Red Bull y un estado de forma cada vez mejor.
La lucha por los puntos se puede animar mucho si finalmente Hamilton participa en el Gran Premio, una decisión que Ron Dennis tomará antes del warm up; la salida desde la décima posición es un reto que nunca ha enfrentado, y que daría una medida efectiva de su competitividad en Fórmula 1.

No pierdas de vista a Massa, los problemas de dirección, la NGK Schikane y a Webber.

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