28 octubre 2006

Resumen - Campeonato del Mundo 2006

Llegado el final de esta primera temporada comentada en El Anaconda llega la hora de hacer balance; y contra la costumbre de los exhaustivos análisis parece recomendable hacer un breve resumen resaltando las claves.

Victoria - El ganador ha sido, en todos los sentidos, Fernando Alonso, que ha confirmado su potencial con un segundo título, al alcance de muy pocos, con varias victorias y una mala racha soportada con éxito.
Además de Renault, por supuesto, Ferrari ha sido el equipo con el mejor resultado después de la nefasta temporada pasada; ambas escuderías se han alzado sobre las demás, dejando únicamente una victoria en manos de Honda.

Decepción - La mayor diferencia entre las espectativas y los resultados ha sido la de Williams, que ha sufrido mucho la pérdida de los motores BMW.
Por su parte Kimi
Räikkönen ha sido la cara de la peor temporada de McLaren, tras la espantá de Juan Pablo Montoya. Los dos equipos han confirmado su rendimiento por debajo de lo esperado con dos registros históricos rotos: Williams ha terminado sin pisar el podio y McLaren sin ganar una carrera.

Sorpresas - Dos pilotos y una escudería han vivido las alegrías más inesperadas. En el mismo Gran Premio, el disputado en Hungaroring, Jenson Button lograba su primera victoria, en una carrera fantástica, cuando nadie apostaba por verle ganar y mucho menos con Honda; mientras que Pedro Martínez de la Rosa, recién reincorporado a la competición conseguía un segundo puesto con sabor a victoria.
BMW, de nueva creación, ha deslumbrado por su regularidad en la primera temporada. La escudería ha dejado atrás Williams, consiguiendo por fin sacar el máximo rendimiento a sus propulsores con la dirección de Mario Theissen, el principal responsable de este éxito.

Promesas - BMW ha demostrado tener un coche muy competitivo, pero su acierto con los nuevos talentos ha ido aún más lejos. El piloto más deslumbrante ha sido Robert Kubica, que disputó su primera carrera de manera imprevista y terminó séptimo (aunque sancionado por el peso), y en su tercer Gran Premio consiguió llegar al podio. Su sustituto como tercer piloto, Sebastian Vettel, ha sido el otro novato que ha sorprendido a todos sin haber disputado una sola carrera: en su estreno como piloto de pruebas, el primer contacto con un Fórmula 1, consiguió el mejor tiempo en los entrenamientos del viernes, marca que repitió el siguiente fin de semana.

Despedidas - Esta temporada será recordada como la última de la era Schumacher. Es la principal noticia, la retirada de Michael Schumacher, aunque también han abandonado el Gran Circo este año otros dos pilotos con personalidad: El Gordo Juan Pablo Montoya, que mostrará su carácter en la NASCAR, y el Campeón del Mundo Jacques Villeneuve, que abandona definitivamente la competición.

La carrera - Sin ninguna duda, el Magyar Nagydij, el Gran Premio de Hungría. Era la primera vez que Hungaroring vivía una carrera sobre mojado, ¡y qué carrera!. Hubo remontadas, trompos, accidentes, adelantamientos, bravuconadas, sanciones y un podio tan sorprendente como justo; un Gran Premio de los que hacen afición, histórico, lo mejor de esta temporada.

Por último quiero daros sinceramente las gracias a todos los lectores de El Anaconda, a los que os informais con los previos, a los que habeis seguido las crónicas, a los que me leeis y os reís conmigo. Muchísimas gracias, por supuesto, a todos los que dejais comentarios valorando el trabajo.

Gracias a todos, de verdad, sin vosotros El Anaconda no sería posible.

23 octubre 2006

Análisis - Interlagos 2006


Acabó el Gran Premio de Brasil.
Acabó el Campeonato del Mundo.
Acabó la era Schumacher.

La sencilla victoria de Felipe Massa en casa ha quedado, como se esperaba, reducida en importancia frente al protagonismo de Fernando Alonso y Michael Schumacher. Los Rayos Rojos se han mostrado a un nivel superior, inalca
nzable para el resto de equipos; y sólo las circunstancias de carrera han impedido la última victoria de Zapatero.
La favorable situación de El Nano antes de iniciarse la carrera mejoró aún más con los problemas de su rival, lo que alejó a Renault de una estrategia excesivamente conservadora y llevó al Campeón del Mundo al podio.

La salida dejó clara la intención de Michael Schumacher: arriesgar al máximo, buscando el mejor resultado a cualquier precio; su última carrera ha sido una de las que más ferozmente ha disputado.
Desde el principio el Ferrari se lanzó al interior de la Descida do Sol, el punto de adelantamiento dónde se han visto las maniobras más espectaculares en Interlagos, intentando pasar a los BMW sin éxito en principio; Fernando Alonso se mantenía en la cuarta posición y parecía que Kimi Räikkönen podía plantar cara a Felipe Massa, aunque pronto el líder puso un ritmo superior.
Al final de la primera vuelta Zapatero conseguía ponerse sexto, detrás de su Hermanísimo.

El primer problema de un Gran Premio con menos accidentes de lo habitual se lo buscaron los Williams, que remataron una temporada nefasta con una actuación a la altura. Nico Rosberg impactaba a Mark Webber, haciéndole perder el alerón trasero y dejando su propio monoplaza seriamente dañado; tanto que mientras El Almirante conseguía llegar a su box para abandonar, su monoplaza se cruzaba en el ascenso, chocando con el tren trasero contra el muro y provocando la salida del Safety Car.
Antes de ver el desenlace del incidente entre los Williams, Físico conseguía pasar a Rubinho adelantando por el exterior al final de la recta para ganar la trazada en la S de Senna.
La situación con el coche de seguridad en pista señalaba la excelente progresión de Jenson Button, por delante de Pedro Martínez d
e la Rosa y Nick Heidfeld.

Al reanudarse la carrera, con la caravana reagrupada, Iceman intentó aprovechar la ventaja recuperada a Massa, aunque de nuevo éste volvió a escaparse; los Toyota comenzaban a mostrar sus carencias y cierta fatiga, con Verdaderamente actuando desde el tercer puesto como tapón de El Nano, Físico y Zapatero, muy pegados.
De pronto el ritmo de Toyota se desplomó, y Fernando Alonso pudo ganar distancia a su compañero, acosado por Michael Schumacher.
Tras varias vueltas intentándolo Zapatero se decidió e inicio una maniobra larguísima para pasar al Físico, colocándose desde el principio de la recta principal, en plena subida, por el exterior, rodando en paralelo para conseguir poco a poco la posición y rematando la acción en la Descida do Sol, por fuera, para tener la mejor trazada de la S. Tras la hazaña, antes de abandonar la chicane, los Bridgestone se resintieron y reventó el neumático trasero izquierdo, sometido a una frenada muy fuerte: el Ferrari tenía que completar una vuelta completa sobre la llanta hasta el pit lane, con la notable habilidad de Schumacher demostrada evitando una salida de pista casi segura.
Los Toyota abandonaban simultáneamente por problemas en la suspensión, desaprovechando una excelente clasificación, y más tarde
serían acompañados por David Coulthard.
Los coches se empezaban a emparejar en batallas particulares; Button apretaba a Barrichello, Alonso se encontraba con el ritmo bajo de Räikkönen y Heidfeld intentaba aprovechar su diferencia de peso sobre De la Rosa, lo que aproximaba a ambos pilotos a Robert Kubica.

El primer pit stop lo realizó Iceman, y el más peligroso Fisichella y Barrichello: mientras Físico rodaba por el pit lane Rubinho acababa su parada e intentaba ganar la posición saliendo con rapidez; a duras penas evitaron el choque, y rodaron en paralelo con la limitación de velocidad activada, hasta que el Honda se rindió. La carrera reflejaba un sorprendente resultado, a la altura de las remontadas de Button y Schumacher, el decimosegundo puesto de Takuma Sato, con el mejor Super Aguri de la temporada. Parecían luchar entre los tres por la ascensión más espectacular, y aparentemente el Honda iba ganando; tras su parada, casi simultánea a la de Alonso, Botón salía marcando un ritmo fantástico, consiguiendo adelantar a Iceman en el punto habitual, el final de recta, con el depósito lleno; una maniobra que casi imitó perfectamente Robert Kubica al pasar a Vitantonio Liuzzi, aunque el Toro Rosso enfiló mal la S e impactó levemente al BMW que lo adelantaba.
Nippon Ichi hacía su primera parada a mitad de carrera, confirmando su estrategia y abandonando la presión de Alonso, Button y Räikkönen.
Mientras Barrichello presionaba a Fisichella, Zapatero demostraba el poder de su mecánica adelantando a los dos BMW. Al pasar a Kubica cometió un error en la S de Senna, aunque recuperó la posición ganada en la vuelta siguiente en el paso por la entrada al pit, asumiendo un gran riesgo. El ascenso del Rayo Rojo era imparable.

Llegó el tramo final de la carrera con la segunda parada de Botón, Físico y Rubinho, que se convirtió en la nueva víctima de Zapatero y el final de recta con su Honda cargado de combustible. Lo más importante fue el pit stop de El Nano, que lo situaba definitivamente en la segunda posición, muy por delante del inspirado Jenson Button.
La culminación de la doble remontada de Michael Schumacher parecía llegar con la captura de Giancarlo Fisichella; parecía sólo cuestión de tiempo que el imparable Ferrari se hiciera con él y, como estaba previsto, Físico volvió a mostrar su faceta menos competitiva y bastaron pocos intentos para que lo adelantara: Fisichella llegó a demasiada velocidad al final de recta esquivando la maniobra que tantas veces había realizado Schumacher, y eso provocó su salida en la S, un regalo de despedida para Zapatero.
Nick Heidfeld también padecía la S de Senna, sólo que en su caso el monoplaza se acabó cruzando e impactando contra el muro, provocando el abandono del primer BMW, tan irregular como el rendimiento de su escudería en Brasil.

Y llegó la batalla más espectacular del Gran Premio y una de las mejores de la temporada: Michael Schumacher alcanzaba a Kimi Räikkönen.
Zapatero comenzó a buscar el hueco, como ya hiciera con Físico, y realizó una gran tentativa en la Juncao, metiendo el alerón delantero por el exterior, aunque lo único que consiguió fue rodar en paralelo con Iceman, más duro que el Renault.
Räikkönen tenía claro por dónde y cómo serían los intentos más peligrosos y comenzó a jugar estrategicamente al final de recta, sin cometer errores; la Flecha de Plata dejaba la trazada antes de llegar a la Descida de Sol, invitando a intentar el exterior a Zapatero, para recuperar la mejor trayectoria a continuación, eliminando cualquier opción con ese engaño.
Ambos tenían claro que no siempre podría repetir con éxito la maniobra, por lo que Schumacher se lanzó al interior de la bajada en la vuelta siguiente, mientras que Räikkönen apostaba por mantener la trayectoria óptima. Esta vez acertó el Campeón del Mundo y el Ferrari descendió en paralelo al McLaren, en una imagen memorable, con una leve ventaja concretada en la S de Senna; Zapatero ya era cuarto, después de salir décimo y sufrir un reventón.
La bandera damero vió pasar al Felipe Massa, ganador de la carrera, y a Fernando Alonso, Campeón del Mundo; y la llegada de Jenson Button y Takuma Sato, después de remontar once y nueve posiciones, respectivamente.

El Gran Premio de Brasil pasará a la historia como la última carrera de Michael Schumacher y la consecución del doble Mundial de Pilotos de Fernando Alonso; aunque la competición en sí tuvo claves más interesantes.
La superioridad de Ferrari, demostrada por la aplastante victoria de Felipe Massa y confirmada por la doble
remontada de Michael Schumacher demuestra el progreso desde mitad de temporada; la competitividad de Fernando Alonso, pr otra parte, queda probada con su segundo puesto logrado con lo que debía haber sido una estrategia y ritmo conservadores.
Por parte de McLaren y BMW el resultado ha sido bastante decepcionante, a pesar de la entrega de Kimi Räikkönen. Mientras, el resultado ha sido impactante en el caso de Jenson Button, que desde el puesto decimocuarto ha alcanzado la tercera plaza en una carrera poco accidentada. Cada vez es más profesional el estilo de Botón, infalible y discreto, ajustado a su ritmo y obteniendo el máximo partido de su Honda.
Pero si ha habido una sorpresa en Interlagos ha sido el décimo puesto de El Huracán; la progresión inesperada de Takuma Sato hasta la plaza décima ha sido una bomba en Super Aguri que tiene que avergonzar a unos cuantos en otras escuderías.

Felicidades por tanto a Felipe Massa, Jenson Button y Takuma El Huracán Sato, los héroes de la jornada.

Enhorabuena grande
a Fernando Alonso, Renault y Michelín, por la recompensa al trabajo bien hecho durante la temporada.

Y sobre todo,


Danke Michael, wir dachten nie, dass dieser Moment kommen wurde

21 octubre 2006

Briefing - Interlagos 2006

La última carrera de la temporada, el Grande Prêmio do Brasil, se disputará sin que el piloto y la escudería vencedores estén decididos.
El Autódromo José Carlos Pace será el último circuito dónde compita Michael Schumacher, un acontecimiento al nivel de la proclamación de los campeones del mundo. El fin de semana en Interlagos será lo suficientemente intenso para ayudar a sobrellevar la ausencia de Fórmula 1 hasta la próxima temporada.

La perspectiva respecto a la situación es casi el resumen de la temporada: la superioridad de Fernando Alonso, las esperanzas de Michael Schumacher, el auge de BMW o el fracaso de Williams son hechos a ratificar por última vez.
Sin duda, por muchas vueltas que se le quiera dar a los puntos de interés, la atención se centra sobre el Campeonato de Constructores, con el título de Fernando Alonso dado por seguro; Ferrari y Renault van a ser seguidos con atención puesto que de sus resultados dependerá la clasificación final.
El resto de pilotos y escuderías tienen sus propias batallas, pero en esta ocasión quedan en segundo plano.

El circuito de Interlagos, en São Paulo, destaca por su sentido de circulación, antihorario; lo inhabitual de este hecho agrava el efecto de las curvas rápidas del trazado.
La pista es vieja, demasiado bacheada, y en conjunto, a pesar de que nunca ha habido un accidente mortal, está considerada como muy peligrosa ... el perro paseándose durante la clasificación de 2004 contribuye a su mala fama. Sin embargo, a diferencia de los circuitos actuales, Interlagos tiene una gran cualidad debido a su antigüedad: fue construido y remodelado adaptándose a los desniveles del terreno, y eso ha dado tramos memorables, como la S de Senna.
El trazado se puede resumir en sus puntos más importantes. De la recta de tribuna se desciende por la Decida do Sol a la complicadísima S hacia la Recta Oposta; de esta zona rápida se pasa a tres curvas muy agudas acompañadas de tramos cortos de aceleración, Laranja, Pinheiro y, especialmente, Cotovelho. A partir de ahí, pura potencia en la curva peraltada en subida que forma parte de la recta de meta: un tramo larguísimo recorrido a fondo; el hecho de que la entrada al pit lane esté en el interior de la curva hace muy complicado el acceso, puesto que la velocidad lanza los monoplazas hacia afuera. Desde el inicio de esta curva hasta la salida de la S de Senna, sin escapatorias en todo el tramo, rozando el muro, está concentrado todo el riesgo de este circuito, que no es poco.

El set up del coche se establece en base a la principal característica de Interlagos: los inevitables baches, que nunca se han conseguido eliminar debido al terreno lacustre.
A pesar de lo que pueda parecer la potencia del motor no es determinante en los tiempos, aunque la subida en sexta es especialmente exigente. Los frenos, los neumáticos no son factores críticos, aunque el grip suaviza el efecto de la pista irregular.
El trabajo de los ingenieros se centra en la posibilidad de lluvia, dada la inestabilidad del clima, debido a una curiosa cualidad de la pista: la temperatura del asfalto se mantiene a pesar del agua. Este hecho plantea el dilema de configurar el set up para seco o mojado; si hay lluvia, pero no la suficiente, los coches preparados para agua solo pueden esperar un mal resultado, y en el caso contrario los que arriesguen se pueden encontrar en la situación de 2003, cuando el desguace de São Paulo se llenó de monoplazas que esperaban menos lluvia.
La posibilidad de lluvia para el fin de semana mantendrá a los equipos con la vista en el cielo y los termómetros en el asfalto.

La clasificación de Brasil hubiera sido de las más tranquilas de la temporada si no hubiera sido por el protagonista del Gran Premio, Zapatero.
En la primera ronda se ha visto el único accidente, el trompo de Tiago Monteiro en el sector más lento, y ha supuesto la eliminación de David Coulthard, muy irregular en el final de temporada, que ha permitido el paso del Toro Rosso de Vitantonio Liuzzi.
La segunda sesión ha estado marcada por el registro impresionante de Michael Schumacher, que ha mantenido hasta el final, y ha mostrado el rendimiento de los Toyota, muy fuertes. En el último minuto Botón, Físico y El Bueno estaban fuera; después del esfuerzo final sólo ha quedado eliminado Jenson Button, junto a Pedro Martínez de la Rosa, desplazado por el Renault y el BMW.
La ronda definitiva ha dado la noticia en la primera vuelta. Nada más iniciarse Michael Schumacher, que se había colocado en primera posición a la salida del pit lane, parecía dejar pasar al resto de los coches, reduciendo su velocidad de forma ostensible; parecía una estrategia de El Mago del Suspense, pero cuando Zapatero se dirigió directamente, sin completar la vuelta, a su box y Ross Brawn saltaba de su asiento en el muro quedó claro que algo grave e imprevisto había pasado.
Michael Schumacher saldrá décimo en principio si no se ve obligado a cambiar el motor.
En cuanto a la pole se ha mantenido en manos de Felipe Massa, aunque tras el primer cambio de neumáticos ha pasado por manos de Físico, El Nano e Iceman antes de que el Ferrari la recuperara. El cuarto puesto de Fernando Alonso parece una ventaja insalvable que nadie esperaba antes de iniciarse la tercera ronda.
El dato más negativo lo han dado los BMW, por detrás de las primeras escuderías, a pesar de la progresión de Robert Kubica al principio; por otro lado los Toyota han brillado en la clasificación. El tercer puesto de Jarno Trulli es prometedor.

La carrera se presenta con Michael Schumacher sin nada que perder, y ha de arriesgar al máximo tras su mal resultado si quiere retirarse si no con un Campeonato del Mundo más, al menos con una última victoria. Por su parte Fernando Alonso seguramente salga a la pista con la calculadora en la mano y se dedique a rodar como un taxi con la vista puesta en Zapatero y la zona de puntos.
El otro punto de atención está en cabeza, en la lucha particular por la victoria que se dará entre Felipe Massa y Kimi Räikkönen; y la batalla de Jarno Trulli por mantenerse en el podio.
La previsión es una victoria para Felipe Massa muy disputada, una remontada fuerte de los BMW (las estrategias sobre repostajes pueden pesar mucho) y, probablemente, de Rubens Barrichello y un puesto discreto, conseguido de forma conservadora, de Fernando Alonso, que le dará su segundo Campeonato del Mundo y seguramente el Mundial de Constructores a Renault, a la vista de la debacle tecnológica de Michael Schumacher.

No pierdas de vista la S de Senna, a Iceman, la recta de meta y a los Toyota.

10 octubre 2006

Los asnos de la prensa española (IV)


Va a ser una salida de las que hacen epoca

Gonzalo Serrano, antes de cualquier Gran Premio.

El tercer y último problema que quiero tratar en la difícil relación del periodismo es
pañol y la Fórmula 1 tiene nombres y apellidos, y se resume en una palabra: Alonsomanía.

Fernando Alonso es el que ha provocado la atención de los medios sobre este deporte, aunque realmente sobre lo que se han volcado es sobre su figura. Cuando este excepcional piloto consiguió su primer podio pasó del anonimato absoluto que tenían los pilotos de Fórmula 1 en la prensa española al protagonismo más deslumbrante.
De pronto un desconocido ocupaba portadas, triunfando en un deporte muy complejo, seguido en toda Europa; la gente estaba hambrienta de información, apasionada por los ganadores, y es la forma en la que hemos llegado a la situación actual.
Los Grandes Premios son seguidos por millones de personas, pero la enorme mayoría lo hacen sólo por ver a Fernando Alonso.

Por supuesto es algo natural y no criticable: ha ocurrido en otras situaciones, con otros deportes, al surgir un aspirante a leyenda; del mismo modo que es natural el proceso posterior, el retroceso de todos esos aficionados eventuales.
Por eso la Alonsomanía provocada por los medios resulta tan ridícula: en lugar de presentar el deporte, una vez que se ha despertado el interés de forma involuntaria, y lograr mantener un número elevado de aficionados, el culto a la personalidad hará huir a todos cuando desaparezca.
Personalmente añadiré que a pesar de admitir que Fernando Alonso es un genio, y que todavía no se ha ponderado lo suficiente lo que supone haber ganado un Campeonato del Mundo, creo que nunca será un mito.
Sin contar, por supuesto, que nunca se había visto a un piloto criticar a su propio equipo como él lo hace; mostrando una actitud deleznable. Las bravuconadas que hacen reír en boca de Eddie Irvine o Juan Pablo Montoya sólo le hacen parecer un bocazas.

Le falta eso que tienen las leyendas.

Es muy sencillo identificar este problema con ciertos ciertas caras de la prensa española. La faceta más visible de la Alonsomanía son las retransmisiones de Telecinco, comentadas por Antonio Lobato y Gonzalo Serrano.
Cuando la Fórmula 1 dejó su situación precaria en La 2 para pasar a Telecinco de forma estelar, con una gran publicidad, los que habíamos atravesado el desierto siguiendo al Gran Circo no nos podíamos creer lo que se nos anunciaba: presencia en los circuitos, a pie de pista, análisis previo a la carrera, entrevistas, podios ... horarios respetados.
El sueño de tener algo cercano a lo que ofrecía RTL estaba ahí, algo que nunca se había hecho con el deporte en España.
Al principio fue puro entusiasmo, descubriendo algunos aspectos curiosos de este deporte, viendo reportajes técnicos, escuchando a expertos ... pero el tiempo ha acabado revelando la cruda realidad.

La cobertura que Telecinco ofrece de cada Gran Premio a priori es muy completa, sobre todo con ese espacio previo que muchas televisiones del mundo envidiarían; o así fue en un principio. Los reportajes previos han abandonado casi totalmente la mecánica y su espacio lo ocupan vídeos editados por las escuderías como forma de publicitarse; las entrevistas desde la parrilla no se hacen a los pilotos, como pronto se descubrió, se hacen exclusivamente a Fernando Alonso (excepto alguna pregunta a Marc Gené o Pedro Martínez de la Rosa)
Los previos de Telecinco se han convertido en un derroche de medios, aprovechados para mostrar dónde se sienta El Mago del Suspense o el menú del motorhome de Renault.

Antes de analizar a estas luminarias uno a uno me gustaría rescatar los mejores aspectos, que los hay, de las retransmisiones actuales de Fórmula 1.
En primer lugar fueron las primeras en las que se estableció un despliegue referente a un evento deportivo; siendo un mérito mayor dado que la Fórmula 1 no era un espectáculo de masas. También es destacable el esfuerzo por mostrar la historia del Gran Circo, los pilotos, escuderías y trazados legendarios, y buscar expertos de verdad para la elaboración de reportajes.
Quizá mucha de la información sea accesoria, pero es mejor echar para que sobre.
Sin duda lo mejor de las retrasmisiones de Telecinco es Pedro Martínez de la Rosa.
No es locutor, ni periodista; es más importante: es piloto de Fórmula 1. Conoce los aspectos técnicos, sabe lo que es la competición y, sobre todo, basta su palabra para callar los comentarios descabellados que a veces se oyen en la cabina.
Nippon Ichi sabe de lo que habla, y se nota. Sus análisis de la situación de carrera, o del resultado, son precisas miradas de un experto, siempre acertadas, porque ante una acción confusa reconoce su incapacidad para explicarla ante la falta de datos. Se echa de menos Pedro para frenar las teorías de los iluminados comentaristas, que interpretan siempre las claves en pro de Fernando Alonso.
Pedro Martínez de la Rosa está totalmente aparte de los que eran sus compañeros, con otro estilo y autoridad en la materia que lo situaban por encima de ellos, a los que hay que analizar con cuidado.

Victor Seara. El menos malo, quizá porque sea el que menos habla. Está a pie de pista, y durante la carrera en el pit lane, desde dónde hace sus intervenciones, breves y casi siempre respondiendo a preguntas de Antonio Lobato.
No se puede decir que tenga mucho que ver con la Fórmula 1, porque su función la podría hacer cualquier estudiante de periodismo capaz de hacer un par de preguntas manidas, mirar que tiempo hace y diferenciar unos slicks de unos intermedios.
Sin embargo este personaje tiene un weblog en el que loa a Fernando Alonso, por supuesto, en el que analiza la carrera (que dificilmente podrá haber visto) centrándose en las posibilidades y avatares del piloto de Renault, es decir, tiene poco que ver con el Gran Circo; es simple alimento de la Alonsomanía, acorde con este personaje gris.

Antonio Lobato. La cara de la Fórmula 1 en Telecinco. Este periodista deportivo saltó desde tratar de fútbol en los informativos a ser un gurú del automovilismo; su labor es comentar lo que ocurre en carrera, de manera que necesitaría una base mínima y fácilmente adquirible.
Sin embargo Lobato es la Alonsomanía personificada. Su enfoque de la competición está exclusivamente centrado en el piloto asturiano, paisano suyo, independientemente de lo que pase. La interpretación de cualquier suceso se hace a mayor gloria de Fernando Alonso, infalible, de forma que la culpa de sus errores siempre la tiene su equipo, la impericia de los otros corredores o la famosa conspiración, alimentada por este periodista.
Todo lo que no le ocurra a El Nano es ignorado, y es tiempo aprovechado para los cálculos sobre la situación de Alonso en carrera y en el Campeonato del Mundo. En los reportajes previos muestra detalles tan interesantes como el sillón donde se sienta Jean Todt o, por supuesto, la puerta del dormitorio de Fernando Alonso.
Algo pasa en relación al Renault número 1 cuando se escucha su famoso grito de guerra: ¡Atención!.
Su obsesión es comparar a Fernando Alonso con Ayrton Senna (...).
En menor medida defiende a su compañero Pedro Martínez de la Rosa, justificando acciones que en otros pilotos son motivo de protesta o burla:
Ha hecho un trompo, eso sólo les pasa a los valientes.

Gonzalo Serano. El experto en motor. Director de Más Que Coches, es el valor añadido a los comentarios de Lobato con detalles técnicos ... si se puede considerar eso el dar la referencia de los coches.
Éste es el grande, el protagonista, la auténtica figura de las retransmisiones de Telecinco. Gracias a sus comentarios absurdos y opiniones más allá de la subjetividad encarna al asno de la prensa española, mucho más que Jesús Fraile que, al menos, no se presentaba como experto.
En primer lugar posee el principal defecto de Antonio Lobato, es decir, la Alonsomanía y todo lo que implica. Aprovecha saber que su coche se identifica con la referencia R26 para criticar al equipo Renault, sobre todo en cuanto a estrategias, centrándose especialmente en sus esforzados mecánicos.
A partir de ahí se extienden sus odios particulares, basándose en el culto a Fernando Alonso: Ralf Schumacher, haga lo que haga, siempre será considerado un piloto peligroso, que tiene volante en la Fórmula 1 por su hermano (¿realmente este hombre sabe cómo funciona el Gran Circo?); Kimi Räikkönen es un inútil que destroza los motores, la suspensión o los neumáticos por su forma de conducir, un caso contrario al de Renault, culpable de todos los fallos de su primer piloto; o Jenson Button, un piloto mediocre, que apenas ha ganado una carrera y ha realizado algunas de las maniobras más notables de las dos últimas temporadas.
El mejor ejemplo de quién es este tipo y su comportamiento es su relación con Pedro Martínez de la Rosa, la otra cara de la moneda con sus conocimientos y su forma humilde de expresarlos. Nippon Ichi siempre ha preferido mantener las distancias aunque llegado cierto punto ha entrado a corregir algunas opiniones sin sentido, especialmente las de Serrano; con el tiempo la enemistad se ha hecho patente en los directos con los ataques del periodista. La culminación fue una de las últimas intervenciones de Pedro antes de su regreso a las pistas; Gonzalo Serrano dejó caer que su calidad no era suficiente para competir, para llevar el McLaren, en un tono bastante sarcástico, y fue contestado de forma tajante:
Bromas aparte ... porque espero que eso fuera una broma.

Ahora ya no tiene quién le controle por su bien, y todo es posible a partir del momento que pronuncia su lema:

Si parpadean se lo van a perder ... y si bajamos el volumen además lo disfrutaremos.

Antes de enumerar algunas de las joyas que han dejado para la posteridad estos individuos me gustaría destacar cuatro puntos importantes, que mejorarían notablemente la retransmisión:
  1. Existen más pilotos que Fernando Alonso.
  2. Hacer una traducción simultánea es muy difícil; esperando a que acaben las declaraciones se entenderá la versión al castellano y, el que pueda, en el idioma original.
  3. No se debe inventar lo que no se entiende. Si Pedro Martínez de la Rosa entiende las conversaciones por radio y no está, no se debe intentar imitarle.
  4. Magic ya existió en el Gran Circo ... lo llamaban Ayrton Senna.
Ahora sí, Gonzalo Serrano y Antonio Lobato en su salsa.

Button adelantó a Alonso porque tenía problemas mecánicos en el alerón delantero. Parece que con un bache se le descolocó, entonces tuvo que bajar el ritmo, y fue cuando Button aprovechó para adelantar. Después, milagrosamente, el alerón de Alonso se volvió a colocar, puede que con otro bache, todo puede pasar en la Fórmula 1.

Comienza la operación salida en el Gran Premio de Australia.

Y ahí vemos a Fisichella corriendo a 260 nabos por hora.

Los retrovisores del Renault se mueven mucho, estos errores de diseño no deberían pasar en un equipo plagado de ingenieros profesionales que se gastan millonadas en diseñar un coche.

Speed frena 1 segundo antes que Coulthard, se nota la diferente conduccion de un V10. (Diferencia Speed - Coulthard un segundo y varias décimas)

El coche de Kubica debe tener algún problema, no sabemos que le puede estar pasando. (Slicks sobre pista mojada)


(Conversación de Monza 2004)
- Atención señores:¡Alonso es el lider!. Alonso tiene la carrera en sus manos, esta vez nadie lo puede parar. (Vuelta 5)
- ¿Bueno, entonces descartamos a Michael?. (Después del primer
pit stop)
- Schumacher líder provisional, y ficticio ahora mismo. (Ganador Rubens Barrichello, Michael Schumacher segundo y Fernando Alonso retirado)

- Michael ha aflojado en esta vuelta, ha debido encontrar tráfico, porque ha bajado a 1'29" (Tras varias repeticiones de la salida de pista de Schumacher)
- Tendrá las ruedas frías.

- Ha adelantado en la una zona muy complicada, Pedro ¿no es así?.
- No. Ha adelantado en el sitio más adecuado para hacelo.

Esta es la salsa del automovilismo. (Ímola 1994. No comment)

08 octubre 2006

Análisis - Suzuka 2006

Imprevisible. El Gran Premio de Japón no ha sido una carrera divertida, ni emocionante, al menos en su desarrollo, pero si lo sorprendente es aquello que rompe lo pronosticado esta ha sido una de las colecciones de sorpresas más grandes de la temporada.

Desde antes del inicio, con un sol de justicia en el cielo en lugar del tifón esperado, quedaba claro que ; aunque después de cada entrenamiento se asumía un resultado futuro. De la misma manera se ha desbaratado la ventaja de Michael Schumacher, la superioridad de los Bridgestone, la fiabilidad de Ferrari.
El guión era sencillo: Zapatero pasa a Massa, los Ferrari escapan, el resto de los monoplazas se ajustan al ritmo de Toyota y Michelín aguanta como puede. El objetivo estaba definido ante esta perspectiva: Felipe Massa debía acompañar a Michael Schumacher y los Renault adelantar a los Toyota y perder la menor diferencia posible.
Pero cuando todo dejar de funcionar para bien o para mal, adaptarse es la estrategia de los fuertes.

La salida ha obedecido a lo planeado con Fernando Alonso arrancando de forma excepcional, pasando a Jarno Trulli por el interior de la primera curva y asentándose en la cuarta plaza. El otro Renault ha protagonizado la peor salida, cediendo ante los Honda; todo indicaba que tocaba ver al Giancarlo Fisichella mediocre.
El mejor ritmo lo marcaban Felipe Massa y El Hermanísimo durante la primera vuelta, mientras que Rubinho se veía obligado a entrar al pit lane en la segunda para cambiar el alerón delantero.
En el inicio, después de los adelantamientos de la salida, se establecía la pelea entre Mark Webber y Robert Kubica, dos pilotos duros que partían desde atrás. Cuando la mayor parte de los monoplazas rodaban en caravana, en la recta de tribunas Kubica se abría para adelantar a coches más lentos, momento que aprovechaba El Almirante para coger su rebufo, ponerse en paralelo aprovechando la anchura de la pista y pasar al BMW.
Por delante Zapatero pasaba a Massa con pocas dificultades en la recta principal, muy distinta maniobra del derroche de fuerza del Midland de Tiago Monteiro adelantando a Vitantonio Liuzzi, un cambo de orden poco habitual.

Finalmente, tras muchas vueltas, Fernando Alonso, cada vez más seguro por el rendimiento sorprendentemente bueno de los Michelín, cazaba a Ralf Schumacher; y paralelamente Giancarlo Fisichella apretaba al otro Toyota, pilotado por Jarno Trulli.
Se mantendrían esta posiciones, a pesar de los intentos de los Renault, hasta la primera parada.
Verdaderamente realizó el primer pit stop, bastante más tarde de lo previsto, dejando el camino libre a Físico.
En pista Iceman se pegaba a El Bueno, mientras El Nano, por fin, conseguía pasar a El Hermanísimo por el interior de la primera curva como hiciera con su compañero.
Inmediatamente paraban los Ferrari, hecho que aprovechó Fernando Alonso para recortar la distancia con Michael Schumacher gracias a la diferencia de peso, en una carrera que cada vez le resultaba más favorable; de hecho a su salida Massa se encontraba con Heidfeld, que se iba a convertir en un bloqueo para el Rayo Rojo.
El pit stop de los Renault colocaba, gracias a la presencia de El Bueno, a El Nano en la segunda posición, a pesar de los esfuerzos de Felipe Massa por pasar al BMW.
La serie más larga en cabeza fue la de Michael Schumacher, aunque se queda corta ante las veinte vueltas de las Flechas de Plata antes de pasar por el pit lane, evidentemente aprovechando su ventaja en la carga de carburante.
Por detrás comenzaban los incidentes, cuando el alerón trasero del Midland de Christijan Albers se desprendía, cayendo sobre la rueda y destrozando el tren posterior. El neumático salió despedido del monoplaza, desgarrando las sujecciones y partiendo el eje, que quedó sobre la pista, en la Curva S aunque, afortunadamente, fuera de la trazada.

El segundo pit stop invirtió las posiciones de los Toyota, los primeros en entrar, de manera que Verdaderamente tomó la delantera a su compañero, aunque éste no se separaría de él, buscando el error. Tras la parada de los Renault Físico se colocó entre ellos y rodó en paralelo con Jarno Trulli en una gran exhibición para adelantarlos.
Hasta ahora los pit stops habían dado la vuelta a las previsiones, y el rendimiento de los neumáticos era el contrario del esperado; los Toyota caían muchos puestos, Botón alcanzaba una buena posición y Físico protagonizaba una remontada espectacular, sin contar con la magistral carrera de Fernando Alonso.
Quedaba el último repostaje de Michael Schumacher para ver la culminación de los imprevistos.

El pit stop de Zapatero fue rápido y eficiente, de forma que dejaba la carrera sentenciada, aunque bastó una vuelta para romper el orden. El Ferrari número tres comenzó a arder en la aceleración, dejando como marca una nube blanca que certificaba el abandono del campeón del mundo; Michael Schumacher se dirigía al box, con una retirada en su penúltima carrera cuando prácticamente estaba ganada, saludando al público, dispuesto a consolar a sus mecánicos.
Era el adiós al Campeonato del Mundo de una de las leyendas de la Fórmula 1.
Inmediatamente las cosas se relajaban en cabeza y cada piloto asumió su puesto. Una vez que Iceman realizó su segunda parada se mantuvieron las posiciones hasta el final.
El único suceso reseñable fue el accidente de Mark Webber, que llegó muy pasado a la última curva, salió de la pista y destrozó su monoplaza por la cercanía del muro.
Robert Kubica apretó a Nick Heidfeld por la última plaza de puntos, aunque no consiguió pasarlo.
Bajo la bandera damero pasó Fernando Alonso, pletórico, en primera posición después de una carrera memorable, sorprendente para todos, que ha certificado casi totalmente el Campeonato del Mundo. De la misma forma el tercer puesto de Jarno Trulli casi ha sentenciado el Mundial de Constructores.

Acabado el Gran Premio de Japón, la conclusión es definitiva.
Ha sido una carrera fantástica de Fernando Alonso, dónde ha contado tanto su habilidad, como el rendimiento tecnológico y la suerte. Resultará histórica porque ha sido el golpe definitivo al Campeonato del Mundo, convirtiendo Interlagos en un trámite.
Es el ganador de este Gran Premio, lo que seguro le convertirá en el campeón del Mundial de Pilotos; y gracias a su registro y el resultado de su compañero también hará a Renault campeón de constructores. Es el hombre del día y merece la gloria ganada, aunque la imagen de Suzuka no es la suya.
Michael Schumacher ha vivido su último Gran Premio al máximo nivel de competitividad, a la espera del trámite de Brasil. Quedará para la historia el abandono del mítico piloto de Ferrari, que prácticamente ha abandonado la pequeña oportunidad que se presenta complicadísima.
Otra de las conclusiones es el fantástico rendimiento de Michelín, que ha visto ascender a sus pilotos según avanzaba la carrera, mientras que los Toyota, de Bridgestone, apenas han arañado puntos a sus rivales directos, BMW.
También hay que destacar la extraordinaria carrera de Kimi Räikkönen, quinto tras remontar seis posiciones; lo que hace que la tercera plaza del Campeonato del Mundo no esté decidida.

Enhorabuena, por tanto, a Fernando Alonso; sorprendente ganador del Gran Premio de Japón y prácticamente doble campeón del mundo.
Tanto él cómo Renault han sido merecedores de estos títulos y lo vivido en Suzuka es un justo premio a su esfuerzo; además de ser un buen resumen de la trayectoria de piloto y escudería desde su irrupción en el Gran Circo.

Felicidades también a Michael Schumacher por una carrera perfecta truncada por las circunstancias. Esperemos que compita al máximo por la pequeña opción al Mundial de Pilotos y remate su trayectoria legendaria con una carrera emocionante, como él y Alonso merecen.

Zarpamos rumbo a Brasil.

07 octubre 2006

Briefing - Suzuka 2006

Japón, una de las potencias dentro de la Fórmula 1 con proveedores de neumáticos y escuderías, celebra su Gran Premio en el Circuito de Suzuka, que por última vez lo acoge en exclusividad.
A partir del año que viene se alternará el Gran Premio de Japón entre Suzuka y Monte Fuji.

La situación a estas alturas del Campeonato del Mundo está bastante clara, y hay pocas cosas que decidir a falta de dos carreras, aunque una de ellas es el primer puesto, apretado al máximo con el empate entre Michael Schumacher y Fernando Alonso.
La presión en Suzuka la tiene El Nano, que tendrá que quedar obligatoriamente delante de Zapatero si quiere tener opciones reales de ganar el título en Interlagos, corriendo en un circuito Bridgestone. De hecho existe la posibilidad de tener decidido el ganador en Japón, si se diera una victoria de Schumacher sin que Alonso consiga puntuar, algo que no es descartable en absoluto, ya que la victoria de Michael se da casi por segura.
El otro punto interesante, donde todavía queda pelea por la clasificación final, es el cuarto puesto en el Mundial de Pilotos, con 6 puntos de diferencia entre Trulli, Fisichella, Massa y Räikkönen.
Menos definitivo resulta para el Mundial de Constructores, que se decidirá en Brasil, puesto que en las posiciones aún en disputa la diferencia de puntos es mínima entre Renault - Ferrari y BMW - Toyota.

El circuito de Suzuka es un trazado muy viejo que, como otros históricos, ha tenido que ser remodelado para aumentar la seguridad. Muchas de sus curvas han reducido su forma aguda, para crear una zona más amplia en previsión de posibles salidas de pista, y se ha intentado retirar en lo posible la pista de los muros.
Aún así, y a pesar de que resulta casi imposible adelantar, la disputa del Gran Premio de Japón en Suzuka suele ser muy divertida, acorde con el parque de atracciones que rodea el circuito.
A los pilotos les encanta Suzuka, un circuito donde lo más importante es la habilidad, lleno de curvas complicadas y pensado para propiciar errores; esencialmente es un trazado técnico, por lo que conocer el circuito, haber corrido muchas veces y conocer sus pequeños detalles, supone una ventaja muy grande.

Desde el punto de vista técnico lo principal son los neumáticos, para afrontar los cambios de dirección, que se hacen a gran velocidad, aunque es recomendable perder algo de grip para conseguir una conducción estable. Será precisamente el rendimiento de los neumáticos el que marque los límites del monoplaza y aquí, en su circuito de pruebas, Bridgestone tiene ventaja.
De hecho la característica principal de Suzuka es la velocidad media, muy alta. Los frenos apenas sufren en el circuito, siendo uno de los que menos los desgasta, lo que da una idea clara del planteamiento de los ingenieros, que establecen un set up en consecuencia.

En primer lugar el motor es llevado al límite, dado que la influencia de unos pocos caballos más es grande, estimada según Pascal Vasselon, de Toyota, en 0,17 segundos por cada diez caballos. La mecánica sufrirá en consecuencia y seguramente se producirán abandonos debidos a motores exhaustos.
La potencia, los componentes al límite y la poca importancia del frenado hace que sean críticas las chicanes, que obligatoriamente se hacen lo más rectas posibles y que agitarán los monoplazas provocando un riesgo tan grande de accidente como de avería. Es en ellas donde se notará qué escudería ha conseguido mejor maniobrabilidad sacrificando, como se ha indicado antes, parte del grip de los neumáticos logrando, por otra parte, ganar algo de tiempo por vuelta.

La clasificación ha sido la esperada, en líneas generales, descontando que dentro de lo previsto se daba por sentado algunos resultados poco habituales, condicionados por el poderío Bridgestone en casa.
La primera ronda ha evidenciado la fortaleza de los habitualmente más débiles gracias a su proveedor de neumáticos. Nada más empezar Sakon Yamamoto se ha salido, acabando contra el muro, aunque este incidente no ha tenido mayor repercusión.
Hasta el último momento pilotos como Mark Webber estaban eliminados, logrando su paso en el último momento: es el caso de El Almirante. Finalmente ha quedado fuera David Coulthard, dando la sorpresa Christijan Albers que ha colocado su Midland en la siguiente ronda con holgura.
La segunda tanda ha sido la de los resultados sorprendentes, aunque aparentemente discurría con normalidad. A falta de un minuto Rubens Barrichello, Robert Kubica, Mark Webber y Pedro Martínez de la Rosa estaban entre los eliminados, y de ellos se esperaba la última vuelta al máximo para pasar el corte, como suele ocurrir. Han empezado a moverse dentro y fuera de la zona de clasificados, y hasta bien cumplido el tiempo no estaba decidido el resultado, bastante poco habitual. Kubica y Webber quedaban fuera, mientras que sus compañeros pasaban, Barrichello conseguía entrar entre los diez primeros y ambos McLaren quedaban fuera de forma decepcionante.
Lo más destacado, además de la caída de las Flechas de Plata, ha sido el pase de Nico Rosberg; un resultado muy brillante para un novato, teniendo en cuenta el rendimiento pobre de Williams esta temporada.

La última ronda ha empezado con una de esas absurdas salidas desde el pit lane, aunque quizá por la previsión de lluvia estaba algo más justificada, con los equipos buscando su mejor vuelta lo más descargados posible pero con la pista en las mejores condiciones.
El viento en Suzuka era bastante fuerte, por lo que las entradas a por neumáticos nuevos se han producido a media sesión.
Los mejores tiempos han variado entre Honda y Toyota, buscando la pole en casa con estrategias poco favorables de cara a la carrera, como por otra parte se esperaba, aunque Honda ha renunciado pronto a esa competencia quizá buscando equilibrar los resultados del fin de semana.
A pesar de la rivalidad publicitaria Michael Schumacher ha mantenido casi toda la ronda el primer puesto, bastante por encima de los Renault, que han mejorado notablemente en su útima vuelta.
Cuando parecía decidido ha sido Felipe Massa el que ha quitado la pole a Zapatero, que finalmente ha quedado segundo, y han dejado justo detrás de ellos a los Toyota, presumiblemente muy descargados, que han robado la segunda línea a los Renault.
Los cuatro primeros puestos han sido para Bridgestone.

El Gran Premio de Japón se presenta de cara para los Rayos Rojos, que tendrán unos tapones de lujo con Toyota, aunque probablemente éstos tengan que realizar su primera parada muy pronto. Si la carga de combustible es la prevista, dado que cuentan con la ventaja de los neumáticos, a lo mejor pueden dar una sorpresa Jarno y Ralf, lo que cambiaría notablemente el planteamiento.
Un aspecto muy importante a tener en cuenta, y que restaría valor a los resultados de la clasificación, es la posible lluvia.
Existe amenaza de tifón, lo que implica un riesgo serio de una carrera sobre mojado; si esto se diera durante la disputa del Gran Premio las posiciones se verían alteradas de forma imprevisible, dado que la clasificación se ha hecho con slicks, y obligaría a un pit stop imprevisto.
Será interesante observar el planteamiento de Honda, con un resultado bastante discreto al final, pero que conoce Suzuka a fondo, y de McLaren, que cuenta con la posibilidad de cargar el coche al máximo, lo que combinado con el excelente consumo demostrado puede hacer remontar muchas posiciones a Iceman y Nippon Ichi.
En principio la previsión es una victoria sencilla para Michael Schumacher, con un posible doblete Ferrari y tercer puesto para Fernando Alonso; aunque el último escalón del podio estará muy abierto. Si no llueve también resulta muy posible una remontada de Robert Kubica y Kimi Räikkönen hasta los puntos.
Aunque, por supuesto, lo que si está previsto es que llueva, y eso acaba con cualquier augurio.

No pierdas de vista la lluvia, los Bridgestone, las Curvas S, la fiabilidad, a los Honda y la Cuchara.