La estrategia de Ferrari, con los resultados de la clasificación y a la vista del rendimiento mostrado en Albert Park, estaba muy clara para el Gran Premio de Malasia; Felipe Massa aprovecharía su velocidad punta para escapar desde la primera posición y mantenerse muy lejos, por delante, mientras que Räikkönen aprovecharía sus oportunidades con un motor algo tocado.
Han bastado dos curvas y mucho talento para dar la vuelta al planteamiento de los Rayos Rojos.
La salida ha sido una demostración de la profesionalidad de Fernando Alonso, muy concentrado en la salida como la única oportunidad de frenar a los Ferrari, y una exhibición absoluta de Lewis Hamilton, que ha deslumbrado con su habilidad.
Massa ha salido muy flojo, y El Nano ha abierto la trayectoria en busca de la mejor trazada, arrinconando al Ferrari; Hamilton ha aprovechado para pegarse a Räikkönen y ganar el interior de la Curva 1, en paralelo con los dos Ferrari, acelerando en el exterior del siguiente giro, lo que le ha colocado en segunda posición, de forma inesperada para Felipe Massa, que se ha lanzado en las siguientes vueltas en cada oportunidad, aprovechando su velocidad punta frente a la carga de Hamilton.
Más atrás el grupo se ha mantenido muy compacto. Giancarlo Fisichella ha recuperado muchas posiciones, con una solidez que resulta desconocida, y los Super Aguri han entrado en su guerra particular que, de nuevo, ha permitido ver como Takuma Sato se desinfla en competición. Aunque Button ha hecho algún adelantamiento a final de recta, desde el primer momento se ha descartado una remontada de Honda, a pesar de Barrichello ha hecho un buen trabajo, saliendo desde el pit lane.
El primer incidente ha dado con el Spyker de Adrian Sutil al fondo de la Curva 4.
Casi todo el espectáculo de la carrera se ha concentrado en estas vueltas, en el desesperado intento de Massa de pasar a Hamilton, un tapón para ambos Ferrari.
Ha sido la primera prueba de la solidez mental del novato, frente a los nervios de un piloto que tiene mucho que demostrar todavía: Lewis ha aguantado a un Ferrari mucho más rápido con un coche muy pesado, y eso ha supuesto a Felipe asumir más riesgos. Incluso con el Rayo Rojo en paralelo, Hamilton se ha mantenido en la trazada, anticipando incluso los errores de Massa.
La primera rodada por la hierba ha sido el indicio de una frenada muy forzada, que el McLaren ha previsto permitiendo el paso, saliendo a la trazada exterior, para contemplar una salida de pista que ha colocado definitivamente a Felipe Massa en quinta posición, para su desesperación.
Rosberg y Kubica, que ha tenido muchos problemas desde el inicio, han comenzado una pelea, como los Honda, que ha cambiado las posiciones de Button y Barrichello en la Curva 14, demostrando la progresión de Rubinho.
Uno de los héroes de la jornada ha comenzado su ascensión: Alexander Wurz ha adelantado con suficiencia a Scott Speed y se ha lanzado a por Ralf Schumacher.
Por delante, con Fernando Alonso haciendo su propia carrera muy tranquilo, los Ferrari se han emparejado con Hamilton y Heidfeld, apretando fuerte, aunque incapaces de adelantar ni de plantear un riesgo serio; a pesar de ello Lewis no perdía de vista a Iceman, girando su cabeza de forma bastante notable hacia los retrovisores.
La primera parada en el pit lane, un poco después de que Christijan Albers incendiara su coche frente al box, ha sido de Robert Kubica, muy pronto, en un Gran Premio terrible para él. Más tarde entrarían Massa, Alonso y Räikkönen casi en las mismas vueltas, mientras que Hamilton y, sobre todo, Nick Heidfeld retrasaban sus paradas.
En la pista el espectáculo lo daba Wurz, sumando en su cuenta a David Coulthard y marchando a por el siguiente, y El Hermanísimo, que adelantaba por fuera a Speed en la Curva 1, a la caza de Rubinho.
A partir del primer pit stop, Hamilton, con menos carga aerodinámica, comenzaba a recortar la ventaja de Alonso, bastante relajado por que en ningún momento ha bajado de 8 segundos; aún así ha dejado de ser el tapón de los Ferrari y, sorprendentemente, el ritmo de éstos se ha desplomado, muy lejos de las Flechas de Plata.
El resto de los coches, sobre todo los menos competitivos, marchaban en pelotón, muy pegados, detrás de Kubica.
La segunda parada la ha realizado Hamilton en primer lugar, el momento que ha aprovechado Iceman para intentar recortar su diferencia, con posibilidades bastante pequeñas de alcanzar la segunda posición; pocas vueltas después ha parado, justo después que El Nano. De nuevo El Bueno ha sido el último en parar, confirmando el gran rendimiento de los BMW.
En las últimas vueltas Nico Rosberg, que estaba haciendo una gran carrera, se ha visto obligado a abandonar, con los puntos para Williams en la mano; mientras, Kubica, en su día más aciago, entraba demasiado fuerte en la Curva 4, ha patinado con sus ruedas traseras y ha acabado cruzado en la puzzolana, lo que definitivamente lo ha colocado en última posición.
Aunque Webber ha presionado a Wurz, en un duelo muy interesante, Iceman ha despertado.
Kimi ha empezado a apretar al máximo, recortando de forma notable la ventaja de McLaren, hasta cazar a Hamilton, que lo único que ha podido hacer es resistir. Un sólo error hubiera colocado a Räikkönen, intratable, por delante, y ése ha sido el momento en el que Lewis Hamilton ha demostrado su poder mental: agotado, ha mantenido su ritmo, muy concentrado, cerrando los huecos, sobre la trazada, con una profesionalidad absoluta.
La bandera damero ha visto pasar a los McLaren en las dos primeras posiciones, y a Renault cerrando la zona de puntos con Kovalainen.
La conclusión de la carrera es que quizá los Ferrari estén muy bien adaptados, y cuenten con alguna ventaja gracias a su relación con Bridgestone, pero las manos que conducen los McLaren son mágicas.
Fernando Alonso ha estado en su propia carrera, inalcanzable y Lewis Hamilton está escribiendo su leyenda con un arranque de su carrera en la Formula 1 sobrecogedor. Con esta progresión, existen dudas sobre el principal candidato para ganar el Mundial de Pilotos, aunque el de Constructores tiene un candidato muy firme, las Flechas de Plata, en gran parte por demérito de Felipe Massa, que vuelve a plantear las mismas preguntas que en sus inicios en Ferrari.
Por otra parte los Renault, de manera poco vistosa pero efectiva, han puntuado, un consuelo pequeño para una escudería que ganaba carreras no hace mucho.
De nuevo la noticia más negativa, aunque ya no es sorprendente, es el fiasco de Honda, a los que empieza a parecerse Toyota, un equipo superado con claridad por Williams, que hoy ha mantenido la imagen gracias a Trulli y a la avería que ha detenido a Rosberg, que ha mostrado un rendimiento excelente, muy por encima del equipo oficial.
Enhorabuena a McLaren, en progresión, y a Fernando Alonso, que ha mostrado su actitud de campeón; y a Nick Heidfeld, un posible candidato al título cada vez más sólido.
Pero sobre todo felicidades a Lewis Hamilton, imparable, robusto, mentalmente titánico.
Se está fraguando un futuro Campeón del Mundo. Y de los legendarios.
Zarpamos, con mucho retraso, hacia Bahrein.
De un par de ideas para ganar en los Goya del 2018
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Mi querido amigo Luis Ramón sugiere, *for free*, unas cuantas ideas de
tramas para obras cinematográficas que, a buen seguro, coparán los primeros
puesto...
3 comentarios:
Ahhh, pero q hay más. Joer, como yo estas cosas no las leo y las fotos me parecían todas las mismas... jejeje.
Bueno, pero te dejo un saludo.
Saludos desde el Inframundo.
Lo que yo me pregunto es cuantas temporadas estará Hamilton en McLaren, por que en el momento en que se vaya a Ferrari o el otro equipo puntero de esa temporada vamos a tener grandes luchas, ya que supongo que que ahora mismo la escuderia alemana evitará a toda costa cualquier pique en pista entre sus pilotos.
Una de las principales características de McLaren es enfrentar a sus pilotos, y asegurarse que delante esté siempre el mejor: Ron Dennis lidió con Prost y Senna, nada menos.
Por cierto, el equipo es británico.
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